Hasta un pequeño avance, es un avance. Hasta el más pequeño de los pasos vale la pena ser dado, porque ayuda a mantener un impulso positivo.
Si no estás avanzando tan rápido como querrías, no te desanimes. Se creativo, inspírate, enfócate y siente verdadero entusiasmo por la dirección en la que estás moviéndote.
Luego, da el próximo paso y mantente avanzando firmemente en dirección a la meta. Recuérdate a ti mismo que incluso cuando estés avanzando lentamente, estarás yendo sólidamente en la dirección que hayas elegido.
Si, los contratiempos por supuesto llegarán y cuando lo hagan sabrás exactamente cómo recuperarte rápido, porque lo has estado haciendo todo el tiempo. Levántate, mira al frente, y da el próximo paso.
Aunque ello fuera posible, no querrías que todos tus sueños se concretaran al mismo tiempo. Es mucho más gratificante saborear cada etapa a medida que se presenta, sabiendo que habrá muchas más.
Dedica este día a celebrar, disfrutar y aprovechar tu oportunidad de lograr algún pequeño progreso. Siente lo bien que se siente seguir avanzando.