Escucha a la vida
Escucha a la vida, y a aquellos que están viviéndola, sin juzgarlos, sin miedos y sin ningún tipo de prejuicio. Tan sólo escucha y vivencia.
Escucha de verdad lo que otros tengan para decirte, sin distraerte pensando en cómo irás a responder. Oye, porque es tanto lo que tienes para escuchar.
Concéntrate en no discutir, explicar, impresionar ni convencer. Escucha de manera que puedas comprender de verdad.
Escucha para aprender y para saber. Escucha para establecer una conexión profunda y valiosa.
Escucha, no sólo con tu mente sino también con tu corazón. Escucha no sólo las palabras y los sonidos sino al sentido que transmiten.
Cada nuevo día, todo en la vida se une en una nueva y hermosa canción. Escucha, y vive la riqueza.