El secreto es

Hay montones de buenas intenciones, muy positivas, pero no tantas como resultados positivos existen. ¿Cuál es el secreto para transformar tus mejores intenciones en la realidad de los resultados, reales y concretos?

El secreto es que no existe ningún secreto. La mejor técnica es la de olvidarte de intentar descubrir una técnica, y vivir cada momento con tu intención como guía, bien enfocada.

Lo que sea que realmente desees tirará de ti firmemente hacia ello. Deja que sea el deseo el que te indique la dirección, al mismo tiempo que eres tú quien provee la pasión, la energía y el esfuerzo.

En lugar de luchar contras las complicaciones, recorre a paso firme el camino que las atraviese. Lejos de sentir resentimiento por la dificultad del esfuerzo, reconoce el camino que ese esfuerzo provee, llevándote con certeza hacia la realización.

La manera de que el logro tenga sentido, la manera de hacerlo tuyo, es viviéndolo momento a momento. Vive y actúa no a partir de una receta estática, sino a partir del poder dinámico, siempre creciente, de tu más auténtica intención.

Siente quien tú sabes que puedes ser, siente cómo tú sabes que la vida puede ser, y luego pon en acción eso que sientes. El camino del éxito no es algo externo a ti que debes descubrir, sino en cambio la hermosa esencia dentro de ti, que tienes la capacidad de compartir.