Contacte con nosotros
661 685 478
fidelizacion@gitdigital.com

Sanar la herida

Culpando a los demás por tus problemas, les entregas el control sobre tu vida. Líbrate de tu ira, de tu propio resentimiento, y descubrirás muchísimo más espacio para la serenidad y la abundancia.

Ya es suficientemente malo que alguien te haya dañado en el pasado. ¿Tiene algún sentido que sigas sufriendo por eso ahora?

La mejor estrategia pasa por no prolongar el dolor, ni menos aún dejarlo crecer. Tu mejor estrategia está en superarlo lo más rápidamente posible.

Que alguien merezca o no tu perdón no es el punto. El punto es que tú te mereces perdonar para volver a tomar en tus manos el control de tu vida, de manera que puedas vivirla en plenitud.

Tu perdón podría incluso no tener ninguna importancia para aquellos a quienes perdones, en el caso de que estuviesen siquiera conscientes de ello. Para ti, tiene toda la importancia del mundo.

Cuando eres tú quien está lastimado, eres también tú quien puede sanar ese dolor. Sana la herida y deja atrás el dolor, a través del perdón.

Diseño web para empresas: tintaymedia.com